ARQUITECTOS: VOLUAR [Pablo Rodríguez+ Borja Lomas]
SITUACIÓN: C/ CICLÓN 54. MADRID
FECHA PROYECTO: 2018
ESTADO: CONSTRUIDO 2021
FOTOGRAFÍAS: Imagen Subliminal (Miguel de Guzmán + Rocío Romero)
La arquitectura es una interacción entre espacio y personas, siendo ambos elementos necesarios para que esta pueda reclamarse. Este proyecto busca hacer la arquitectura de la calle, donde la calle es entendida como con fin, un lugar donde estar y no simplemente un medio para circular. Crear un espacio compartido para unas familias que sirva como escenario común para la vida.
Se parte de un solar de geometría difícil, un retazo de la trama urbana en forma de cuña, el sobrante entre un colegio y las parcelas de viviendas unifamiliares y que colmata, extrañamente, la parte superior de la colina en la que se enclava. Únicamente el lado del base presenta frente a la vía pública, considerándose el resto de sus límites linderos medianeros con otras propiedades.
Se inserta un espacio-calle con orientación sur y de uso compartido, sirviendo como espacio intermedio que dialoga entre lo público de la calle y el espacio privado de la vivienda. Este espacio sirve como lugar de encuentro de los vecinos, un espacio donde los más pequeños puedan jugar libremente sin la amenaza de los coches, un salón común que permita su apropiación de los que lo habiten pudiendo imponer las necesidades y deseos que todo el condominio acuerde: celebraciones y comidas, reuniones de la comunidad, juegos, etc.
En su parte final se abre a la zona común de la piscina y se colmata con un espacio al aire libre, un pequeño jardín secreto, semi escondido, donde poder conversar con intimidad, leer tranquilamente, o donde los jóvenes roben su primer beso…
Las viviendas se disponen siguiendo franjas según las superficies que permite la normativa, su situación se adelanta o retranquea para evitar la excesiva linealidad y el orden rígido del conjunto, permitiendo un engarce espacial, un juego desordenado de entrantes y salientes que vitalizan el espacio compartido, al mismo tiempo que se impiden visuales directas entre los vecinos.
Se han empleado materiales que aguante bien el paso del tiempo, como la piedra y el gres. El zinc de las cubiertas resuelve también los cerramientos de las plantas superiores y donde las juntas engatilladas dotan de un ritmo a todo el conjunto. En los frentes de cierre se crean un dibujo que busca romper con la planeidad y la simpleza de los testeros emulando un juego falso de un vacío inexistente.